así ha sido mi amor
de fuerte y duradero.
Ya ves, amada mía,
que nada pudo conmigo.
Ni el tiempo me hizo mella
a pesar de los años pasados
y del descorazonamiento.
¡Cómo olvidarte!,
si tú me enseñaste a amar,
y aunque en otros labios
buscaste consuelo,
siempre supe que tu búsqueda
incesante nunca sería fructífera.
Años de olvido,
tiempo de aventuras
y amores perdidos.
Ni tan siquiera
la indiferencia y el olvido
fueron suficiente
para matar mi amor.
Ya ves, amada mía,
que no te miento
y lo que por ti siento
morirá conmigo.
Colección Hablemos de ti
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