olorosa y colorida.
Y su boca fresca, un manantial...
A golpes de repetir su nombre,
se me llenan los labios de besos
con sabor a agua de lluvia.
Quiero decirle que estoy loco
por sus huesos.
por sus huesos.
Y que por cada una
de sus miradas
de ojos de hada,
de sus miradas
de ojos de hada,
estoy dispuesto a ser
su fiel esclavo.
su fiel esclavo.
Mas si no pudiera vivir a su lado,
moriría sin remedio de tristeza
por todas y cada una de las ilusiones
que en ella he depositado.
El tiempo vuela y veo
que se me va de las manos...
y la voz que emito
¡es de condenado!
Antes de ser su esclavo,
quisiera ser su amante
y sentir en mis ojos el fuego
y ver mis manos volar
hasta su fina cintura.
Siento cómo todas las diosas del amor
caminan sobre mi desdichado cuerpo,
sin que a ella le preocupe.
Y ando cabizbajo
con la duda de no ser amado.
Solo ella -prometo- y nadie más,
será la obsesión de mi vida.
¡Mujer de cabellos de sol y de ojos de
mar,
será cofre de joyas y monedas!
Ella y solo ella y nadie más
será la carcelera de mi amor.
Y te juro, que aunque el tiempo
pase por encima de su belleza,
pase por encima de su belleza,
yo seguiré siendo
su más fiel admirador.
Y es que su piel
para mí siempre será...
para mí siempre será...
olorosa y fresca,
como la primavera.
como la primavera.
Colección Pescador de ilusiones