Me quedé mirando
mientras ella se alejaba.
Me quedé solo
mientras los pájaros cantaban.
Quedó mi vida
en blanco y negro,
en blanco y negro,
como un árbol en otoño.
Se fue sin mentar palabra.
Se perdió entre las luces del alba.
Las tardes serán extrañas:
Será el cielo azul
y las tardes desangeladas.
y las tardes desangeladas.
Será el mar de papel de plata
y las lágrimas no me dejaran
ver navegar las barcas.
ver navegar las barcas.
Se irá con ella,
todo aquello que amaba,
todo aquello que amaba,
y mi alma nacerá
de nuevo cada mañana.
de nuevo cada mañana.
¡Mi espíritu errara nostálgico
buscando, como los suyos,
otros labios acaramelados!
Colección A quién no le guste la poesía,
que arranque la primera letra.
