con un tono cálido,
hablo de mi, de nosotros,
con palabras dulces,
de momentos especiales,
de proyectos inacabados.
Hablo de ti con amor,
sin rencor, recordando
lo mucho que nos amamos.
Hablo de ti y de mi
con añoranza,
de inolvidables instantes.
De todo aquello
pequeño y grande
que un día nos unió
y que hizo realidad
una vida de ensueño.
Hablo de cosas
que me vienen a la memoria,
de cosas sencillas,
de lugares lejanos.
Hablo de los dos
como si nada hubiera sucedido,
con serenidad, con sencillez,
con humildad, con amor.
Hablo mucho de ti, de mi
y hago mi propia historia
y les cuento a mis amigos
como nos reíamos.
Hablo de ti con sentido,
sin lágrimas, ya ves,
sigo hablado de tí
de una forma distendida
y sincera para seguir
compartiendo mis recuerdos.
¿Y por qué no?
Colección Pescador de ilusiones
