En mis sueños te presentas en forma de nube algodón que gravita en el cielo, eres blanca y ligera. Así eres en el sueño mío y endulzas la noche desde el instante en que besas mi boca. La luz de tu sonrisa me sonroja las mejillas y un simple roce se convierte en vino dulce y acelera mi corazón mientras me miras. ¡Oh! Canción de ángeles celestiales que elevan mi cuerpo en el primer beso que yace sobre mis labios.
Y grito, a los cuatro vientos, que eres mía, mía eres, y ya no saldrás de mi sueño fácilmente. Te miro y extiendo mis redes hasta el fondo de tus ojos verdes y en la malla de mi amor quedas presa, cautiva de cantos de sirenas envuelta en algas marineras. Y es en este injusto instante cuando despierto y recojo las redes de mi sueño contigo dentro.
Colección: POEMAS DE TERRONES DE AZÚCAR BLANCO.