jueves, 6 de mayo de 2021

LA POLÍTICA Y EL SÍMIL CON EL FUTBOL.

Tengo que confesar que por varias razones he seguido las elecciones de la Comunidad de Madrid con más interés de lo normal. Y tiene su lógica, digamos que con los horarios de la pandemia andamos algo falto de acción y nos sobra tiempo para seguir las noticias. La segunda razón es que los políticos se han encargado de llamar la atención del país entero con sus continuos desaciertos y le ha dado mucho morbo.

Una vez hecho el recuento y tener de nuevo a la Presidenta de la Comunidad de Madrid sentada en su sillón. Alucino con que rapidez se vienen arriba los políticos cuando gana su partido, (aunque sea de un pueblecito).

Vamos a ver, me explico: en las elecciones catalanas, el varapalo del PP fue de campeonato. Recuerdo que se rasgaban las vestiduras  y vendieron hasta la sede de Génova 13, y en un símil futbolero, fue como si hubieran bajado a segunda división. Y ahora, unos cuantos meses después, en Madrid la petan y los jugadores salen a hombros como los toreros, y se creen los nuevos campeones de la Champions league.

Ni tanto ni tan calvo. Qué sí, que ha sido un partidazo y que se ha logrado formar un gran equipo, pero la liga es muy larga y no hay que vender la piel del oso antes de jugar el último minuto de la liga. El contrario ha quedado tocado y le costará superarlo. A eso de la política, cada día lo veo más como a lo del futbol. Como diría Simeone, "hay que ir partido a partido". El entrenador debe saber controlar la euforia o la desazón de la plantilla. Ahora al equipo, le toca volver a los entrenamientos y sufrir en cada encuentro, qué para estos son profesionales y cobran una millonada. 

Pues ¡ala! Ahora para casa, que esto de la pandemia va para largo, y hay que cuidarse y no aprovechar unas elecciones para quitarse las mascarillas y besarse como si no hubiera un mañana.


Colección: CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LO PARIÓ. 

QUIEN FUERA POETA PARA INVENTAR MUNDOS NUEVOS.

QUIEN FUERA POETA PARA INVENTAR MUNDOS NUEVOS. Eres en mi claustro cerrado un caudal de inspiración de muchos quilates, que elevas mis letra...