las mañanas oscuras
y las tardes teñidas de nada!
¡Se han terminado las charlas,
el tiempo de ir y volver!
¡Y en las noches frías de invierno
ya no habrá quien me encienda la chimenea!
¡Se han terminado las siestas,
la ingenuidad de tu cuerpo de hada
y las largas caricias
que nos hacían más cortas las noches!
¡Se ha terminado tu sumisión,
tus labios de pasa,
tus pechos de cereza
y la dulzura de tu mirada
diciéndome al alba "no te vayas"!
¡Ya se ha terminado todo aquello
pequeño y grande que mi corazón
te ofrecía a mi llegada!
¡Y yo te añoro tanto!
Colección Puntas de lápices