¿Dí, dónde dejamos el amor
si lo cambíamos por odio?
¿Dí, dónde cambiamos los besos
si se convirtieron en malos alientos?
¿Dí, porqué llamamos a la lluvia
si sólo sirvió para apagar el fuego?
¿Dí, ahora a que jugamos
si ya no nos quedan juegos?
¿Dí, para que más noches
si nos sobras horas?
¿Dí, porqué nos llamamos
si sólo es para torturarnos?
¿Dí, porqué lloramos
si no nos quedan lágrimas?
¿Dí, porqué recordamos
si ya no nos queda memoria?
¿Dí, que fué de nosotros
si sólo quedan dos corazones rotos?
si lo cambíamos por odio?
¿Dí, dónde cambiamos los besos
si se convirtieron en malos alientos?
¿Dí, porqué llamamos a la lluvia
si sólo sirvió para apagar el fuego?
¿Dí, ahora a que jugamos
si ya no nos quedan juegos?
¿Dí, para que más noches
si nos sobras horas?
¿Dí, porqué nos llamamos
si sólo es para torturarnos?
¿Dí, porqué lloramos
si no nos quedan lágrimas?
¿Dí, porqué recordamos
si ya no nos queda memoria?
¿Dí, que fué de nosotros
si sólo quedan dos corazones rotos?
Colección Poemas de ángeles de colores
3 comentarios:
Dime si tienes alas y te responderé que son tan grandes que te impiden alzar el vuelo...
Estos poemas de ángeles son un poco enredados y eso que yo bastante enredo tengo conmigo.
Te dejo un fuerte abrazo y como te gusta torturarte te envió un ola terriblemente helada en esta noche invernal.
...ja, ja,ja. Hola Cristina, te veo graciosa y suelta en tus comentarios. Si tuviera alas esteria de visita en el rellano de tu puerta.
No, mis poemas de ángeles no son enredados, ni complicados siempre son fruto de una idea que surge en aquel instante. Cuando el amor se va todo cambia, nada es igual y surgen las preguntas y las dudas y los porqués.
Parece como si no quisiereas mandarme más olas, tu no te preocupes por ellas que yo ya las arreglo...jeje.
Como a mi me sobran las olas perfectas te mando una cualquiera de ellas. Y en la cresta un beso
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