un espíritu o un ángel malo.
Pero ni el uno ni el otro
pensó en frenar mi caída.
Y allí aparecí, en caída libre,
dando giros y haciendo espirales.
Me empujaron un día,
que no llevaba alas.
Me precipitaba contra la tierra
y sentí pánico, porque iba a dar
con mis huesos al suelo.
Caía y caía y nadie me paraba.
¡Quién me empujara no supo lo que hacía!
Porque aquello se convertió en pesadila
y ya era hora que alguien diera,
por finalizado este embrollo.
¡Por favor, que alguien me pare que no llevo alas!
¡Por favor, que alguien entre en mi sueño y me despierte!
Colección Poemas de historias de ángeles
3 comentarios:
¿Y si te tiendo la mano para que no caigas?
De seguro estarás durmiendo a esta hora, te mando un abrazo, bellos sueños.
!!!...Y si nos caemos los dos!!!
Ahí va esta olita fresquita que te mando hasta tu orilla. Mua y más muas.
Hola, un placer pasar por tu buen blog, te felicito por tu gran trabajo, aquí me tienes felicitándote. Te invito cordialmente a que leas mi nuevo poema titulado “El poema cósmico”, es un poema romántico entre estrellas, está publicado en el Blog de Boris Estebitan.
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