apuntaba derecho a mi espalda,
sobornando mis oídos
con vidriosas palabras.
En mi dorso sentí palpitar
un corazón desdeñado,
sin alma ni esperanza.
Hablaba de un pasado lejano
que olía a naftalina, de viejos sueños
y amores incomprendidos.
Ella seguía platicando
sin atreverse a dar la cara.
Vendía humo, con voz apagada.
Se subió al tiempo pasado,
contando historias que solo ella recordaba.
Túneles del tiempo de joyosos espejos.
Hablaba de amor, de sexo y proyectos,
hablaba de sueños, hablaba de cosas,
¡que tal vez, hace tiempo, fueran ciertas...!
Y ahí seguía ella, jugando
con su afilada espada,
pero nunca se atrevió
a dar la vuelta y mirar de frente,
de cara a cara.
Colección Poemas de historias de ángeles
2 comentarios:
Hola Juanjo, dicen que hay ángeles buenos y ángeles malos... esos rebeldes que se revelaron y se fueron a servir al diablo.
Siempre es un placer leerte, te dejo un fuerte abrazo.
Los días están feos y el mar revuelto y marrón, así que la ola te la debo.
¿Sabías que el agua del Río de la Plata es de color amarronada?
Un beso.
Dicen que no existen los ángeles, pero yo no me lo quiero creer, me he pasado la vida creiendo en en monstruos, dragones, cenicientas, principes y princesas... y ahora quiero creer en ellos más que nunca porque vuelvo a tener la edad justa para convertirme en niño y jugar con ellos...
Tener tus comentarios me hacen sentir mejor, sin ellos mi poesia no tendria sentido...
Una ola con olor a playa y arena.
¿Tu sabes que las aguas de las playas de ibiza son de color azul turquesa...?
Ah!!! casi me olvido del beso. Mua
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