¿Cuántas veces tendré que nacer
para dar otra vez contigo?
¿Cuántas vidas viviré y moriré
sin que seas mía?
Y así, una y mil veces me iré
alejando y acercando
del ser por el que voy
a vivir y a morir eternamente.
Lejos, muy lejos,
quedaron los días de poesía,
las noches espesas de besos,
las madrugadas encantadas.
Hoy, las lágrimas se van al río,
un río que va al mar,
a un mar lleno sonrisas,
de caricias y de besos.
En mi alma, vive la soledad,
la misma soledad con que tendrá
que vivir eternamente tu corazón.
Injusto mundo el de los enamorados,
vagando por el limbo del amor,
sin poderse coger de las manos.
Injusto premio nos depara el destino.
¡Arrastrar las cadenas del amor
en busca del amor perdido!
Colección Almas nostálgicas
2 comentarios:
Hola mi bello amigo! Te confieso que me dio un poquito de tristeza leerte.
La imágen que utilizaste es hermosa y tus palabras tiernas y melancólicas.
Tu mar hoy acarició mi rostro y me llenó de poesía.
Abrazos fuertes para vos.
Estimada Cristina. La locura de la vida a través del desierto en busca del amor perdido o de ese otro amor idealizado con el que siempre soñamos y que tal vez no exista. Esta es la tristeza de mi viaje de letras a través del “limbo del amor”.
Gracias por pasar tan hermosa, por delante mi ventana.
Una ola Mediterránea. Juanjo
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