sábado, 15 de agosto de 2020

UN CANTO DE ESPERANZA CONTRA EL CORONAVIRUS.

Se van las horas y tras ellas los días y tras cada día desaparecen las semanas y los meses de la condenada pandemia que nos tiene hastiados en casa encerrados. La vida se ha vuelto triste y la muerte se desliza por las calles, callada y asesina, atenta a cualquier descuido que tengamos para atraparnos en las oscuras sombras del infierno. Es escurridiza, fea, negra, traidora y va cegando nuestras dichas y alegrías en nuestros enclaustrados días. 

El cuerpo se debilita, la mente se despista, pero no olvidemos que debemos seguir siendo fuertes para que no nos coja desprevenidos. Te levantaras cada mañana altivo e invicto con ganas de seguir luchando hasta que venzamos al maldito bicho. ¿Para qué sino? si no fuera porque todavía nos esperan los más gloriosos años de nuestras vidas. Nos aguardan lustros de luz, de esperanza, de canciones y risas.

 ¡Vete ya, maldito virus! Arrástrate por dunas de estiércol y cloacas putrefactas, desaparece por el mismo camino que viniste, que tú siempre serás nuestro peor enemigo. Y después, cuando entre todos hayamos ganado otra batalla a la muerte, será entonces y no antes, cuando salgamos a la calle a gozar plenamente de nuestras joviales y alegres vidas.


Colección: CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE Q1UE LO PARIÓ

martes, 11 de agosto de 2020

AYER TUVE UN MAL SUEÑO

Esta noche soñé que todo fluía como un manantial en calma y mi corazón volvió a sonreir. Soñé que la vida era bella, que en medio del mar navegaban los barcos y que en las calles la gente se abrazaba. Todo eran alabanzas de imágenes dulces y cálidas. Soñé que un solo radiante nos calentaba con rayos de luz de esperanza. Que bonito fué el sueño Cuando vi a los niños jugar en los jardines de infancia ya las madres charlar felices de cosas cotidianas. Unas levas gotas de lluvia, a lo lejos, danzaban sobre los colores del arco Iris.

¿Por qué, de repente llegarón a mi sueño imágenes que me atormentaron?

Unos grandes nubarrones negros cegaron el sol. La gente correo encima casas despavoridos, Mientras la muerte andaba por las calles encima anchas con la guadaña a cuestas. Mi corazón latía como si no hubiera un mañana, quise despertar, abrir los ojos, pero seguía viendo a la muerte sonriente buscando a su presa. 

Oscureció mi pueblo, oscureció el mundo entero. Quise despertar pero no llegué a tiempo. Perdí de vista la luz de luna, el naranjo en flor, el agua de la fuente. Me olvidé del cabello de mi amada y hasta del sonido del viento cimbrar entre los verdes pinos. 
Despierte de un sobresalto y fui a mirar por la ventaba y me di cuenta que todo era cierto, que mi pueblo era un desierto. Volví a dormirme a duras penas y busqué en mi mente un hermoso sueño con el que sobrevivir a mi tiempo. 

Colección: CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LOPARIÓ

domingo, 9 de agosto de 2020

LOS CONSEJOS NO SE DAN, SE PIDEN. GRACIAS.

Me piden que me esconda, que me quede en casa. Que no corra ni salte, que me siente o me tumbe en el sofá o en la cama, pero que no salga a la calle. Todos me hacen recomendaciones y me miran de reojo como si fuera un extraterrestre. Me repiten que lea, que piense, que me reconozca por dentro, pero sobre todo... que no me muera. 

Esto días de confinamiento todos mandan y deciden sobre mi vida. Pero haga lo que haga nada parece ser del agrado de los vecinos, ni de mis familiares ni de los que telefonean de otros lado del planeta y preguntan que si estoy encerrado a cal y canto y, me aconsejan que me esconda dentro del armario, que no respire y que sobre todo no me tire al vicio... de beber vino.

Que miedo me dan tantos consejos gratuitos. Me entra el temor que mis poemas contagien a quien las lea y escribo a escondidas y desinfecto las letras con lejía. Cuando me asomo, veo a los vecinos que gritan a los que deambulan por la calle. - ¡Vuelve a tu casa, mal nacido! que serás el culpable de matar al mundo entero!

Y es entonces cuando me asusto de verdad y me escondo, porque ya no sé si seré yo el culpable de este desastre. Pero insisten e insisten en que no salga y que me quede en casa. Pero luego veo que ellos van y bienes según sus intereses y es entones cuando tengo un miedo atroz de contagiarme, porque debo de ser el único mortal que se queda en casa, mientra los demás acampan a sus anchas.

Colección: CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LO PARIÓ.

miércoles, 5 de agosto de 2020

HOMBRO CON HOMBRO

Algunas de las historias se escriben con la perspectiva que da la vida con el paso del tiempo y el amor que debemos a nuestros mayores e incluso a nuestros difuntos. Las fotos en blanco y negro son testigos del paso de los años igual que el color del cabello de los ancianos. 

Oí, que este país se iba a quedar sin abuelos, pero yo me resisto a creerlo. Pero si así fuera, digo: Que sin los cuentos que nos cuentan nuestros padres de sus abuelos se convertiría en un pais vacío. Y así, no se puede construir el futuro de un pueblo.


Que no olviden los jóvenes, los mismos que ahora no nos necesitan y dicen que somos unos carcas, que un día no muy lejano ocuparan nuestros asientos. No crean que se lo dejaremos fácil, pero si así fuera, tendrían de ponerse las pilas para tirar del carro. Oigo por ahí, que no saben poner el botón de "ON" en marcha, porque han sido muchos los años que se han estado formando a costa de sus ancestos y les falta pràctica.

Dicen que este maldito virus se llevará a los más débiles y palmarán los viejos, aunque serán muchos los que quedarán para salvar el mundo. Vamos a unir fuerzas amigos, vamos a estar hombro con hombro; padres, hijos y abuelos. Unámonos para luchar contra este bicho asesino y entre todos limpiemos el planeta de esta pandemia, para que las próximas generaciones puedan vivir felices y tranquilos


Colección: CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LO PARIÓ

lunes, 3 de agosto de 2020

QUE ALGUIEN PONGA EN MARCHA LA MAQUINA DE LA VIDA


¿Quién puede decirme dónde está la Estrella de Oriente en primavera? ¿O, será que la sacan solo en enero para ir en busca de Jesús el Nazareno? ¿Quién nos guía hoy que la tierra esta encabritada hasta las mismísimas entrañas? ¿Es que los Ángeles ya no salen al portal de Belén a recibir a los campesinos ni a los Reyes Magos para que obsequien al Niño con presentes? ¿No será que el cuento del amor y la esperanza hace meses que terminó y ahora es tiempo de muerte y el pesebre y la tallas de porcelana están guardado en el desván hasta la próxima Navidad?

El mundo se ha convertido en una lotería, nada es verdad ni nada es mentira. Todo es relativo, nada tiene sentido, lo aprendido hasta hoy no sirve de nada y los principios de la vida que nos enseñaron nuestros padres se han ido al carajo. Todo da vueltas como en una noria. Nada será otra vez como antes y sin embargo nosotros no sabemos ser de otra manera. ¿Quién nos hubiera dicho, listillos, que siempre nos cargamos de filosofía barata, que somos todos unos pardillos de tres al cuarto, que viviríamos enjaulados como los pájaros? Creemos saber de todo y no tenemos ni puñetera idea de nada. ¿Quién nos hubiera dicho que estaríamos en pañales, cagados de miedo, esperando que alguien pare la maquina de la muerte? Y todo al fin y al cabo, para salir corriendo ansiosos a los bares a discutir de estupideces sin sentido.

¡Señor, Señor! Saca otra vez la Estrella de Oriente o la que tengas más a mano. Aunque sea en primavera o en verano, pero ¡ por favor! pon de nuevo en marcha la magia de la vida que se nos va el alma en el envite...


Colección: CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LO PARIÓ

CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LO PARIÓ

No, no creáis que había dejado de lado mi afición por el arte de escribir. No, ni se me ocurriría. El tiempo pasa volando y a pesar de intentar disponer de más horas libres para disfrutar de mis aficiones, lo único que consigo en sumergirme más en mis obligaciones laborales y en mi familia. Como iba diciendo, nunca dejé de escribir poemas, cuentos y relatos que con tanto amor y pasión escribo en la soledad de mi encuentro con las musas.

Muchas cosas han sucedido desde la última colección que colgué en mi blog, pero el maldito Covid 19 a sido lo más horrible que hemos conocido jamás y el culpable de haber cambiado nuestra existencia radicalmente. Ha sido un duro golpe a la humanidad, a nuestra forma de entender la vida y a la manera de relacionarnos con las demás personas en cualquier circunstancia que nos rodea. 

Intentaré no defraudar con mi nueva colección "CRÓNICAS DEL CORONAVIRUS Y LA MADRE QUE LO PARIÓ"  Prometo poner toda la carne en el asador en cada poema para sorprenderos con mi particular forma de interpretar la realidad.

Juanjo Cardona.

martes, 10 de julio de 2018

A VUESTRAS 130.000 VISITAS

Sé que puede parecer un tópico, pero os aseguro que ni por asomo hubiera imaginado llegar a esta cantidad de visitas el primer día que mi hijo Adrìa me convenció para montar mi propio blog de poemas. Con su ayuda y con cierta incredulidad por mi parte, ahora hace ocho años, empecé a subir al blog los primeros poemas que tenia celosamente guardados como oro en paño y que sin embargo nadie leía, ni les importaba mi pasión por la poesía. Así que con la ilusión de un principiante fui subiendo mis tesoros para que fueran leídos en el mundo entero con el consiguiente peligro que ello conlleva al exponer la obra a las alabanzas y también a las criticas mundanas. No tan solo colgué mis antiguas reliquias sino que debido al éxito, me tuve que esmerar más si cabe y seguir escribiendo y mejorar mi imaginación para no defraudar a mis seguidores.

Al llegar al centenar de visitas imagine que podríamos habernos reunirnos en un bar para tomar unas cervezas y hacer una lectura poética. Al ir aumentando el numero de seguidores pensé que necesitariamos un teatro para tal acto y con el paso del tiempo el de un cinema. Hoy ya no cabrían las 130.000 visitas ni en un campo de fútbol los lectores que han ido pasando por el blog de www.poemasdehilosdecolores.com, así que ahora me imagino que cada media noche presento un programa de radio con importantes invitados del mundo de las letras para recitar sus obras a los cuatro vientos.

Dar las gracias a todos los que han hecho grande este blog a los que juro solemnemente seguir esforzándome cada día en escribir con la misma ilusión con la que empecé hace ya muchos años. Hoy ya no sabría guardar mis poemas en una simple carpeta porque ahora os pertenecen a vosotros, a los que me habéis hecho mejor como escritor y me habéis obligado a sacar lo mejor de mi en cada trabajo.

Gracias amigas y amigos desconocidos por pasar por mi ventana y de vez en cuando entrar en mi casa que también es la vuestra. Gracias compañeros de letras por leer los poemas de un mundo hecho a mi medida.

VERSO A VERSO, BESO A BESO.

VERSO A VERSO, BESO A BESO. Si la memoria no me falla, queda lejos, muy lejos, aquel primer verso que nació fruto del amor con el primer bes...