CUANDO UNA AMANTE SE VA DE CASA, ALGO SE PIERDE EN LA CAMA.
En la habitación la oscuridad y el silencio invaden cada minúsculo detalle. Su voz no suena, ni su sonrisa retumba, sus besos se los llevó el viento y su aroma desapareció tras ella, el día que cerró la puerta. Mientras, en el cielo, la luna sigue desfilando su fina silueta entre los primeros destellos del alba.
Este desamor ya no me mata, ni me arrastra, ni me desgarra, ni me asusta. El amanecer me encuentra tranquilo, aunque confieso que algunas veces me halla lastimero y lloriqueando: ¿Cómo se puede conocer tanta dicha, tanta dulzura en brazos de otro ser humano?
Colección: 💯 PALABRAS DE COLORES BRILLANTES.
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