Como colibrí, llegó el primer beso de su boca ansiosa sobre mis labios, donde caté por primera vez el sabor de cien pócimas mágicas. Recuerdo
que me amó con un amor inusitado y me besó, como nadie me había besado.
¡Te juro! que mi boca nunca saboreó tanta dulzura, y en cada uno de los besos
que nos dimos, un manantial de agua fresca erizó mi cuerpo.
Hoy te acuso de ser la ladrona de mis besos, porque el día que te
fuiste me dejaste con uno solo, con el desespero de aquellos mil que
murieron presos en tu boca.
Colección: 💯 PALABRAS DE COLORES BRILLANTES