Es ágil, es suave
como gatita de angora.
Al caminar
los cabellos atusa
y, a sus pies,
un manto de pétalos de rosa.
La miro y me pasan
dulce las horas.
Para mi amiga Paquita de Barcelona
Colección Puntas de lápices
Escribo poemas a la soledad, para hacerle compañía, haciéndole la espera más corta y más dulce la sonrisa. Soy de los que creen en el sonido del silencio o de los que habla con el mar. ¡Soy de aquellos que la gente piensa que estamos locos!
AMIGA MÍA. ¡Ay, ay, ay! Quién pudiera volver atrás en el tiempo, aunque ya sabemos que la vida nos empuja hacia un mundo desconocido a pasos...